Tips para una educación acuática respetuosa

Las actividades para bebés, niñas y niños pequeños en el agua están cada vez más extendidas y en este sentido se vuelve indispensable conocer los enfoques pedagógicos que sustentan cada una de las propuestas.

Es muy importante que las familias, los docentes y el ambiente acuático confluyan para generar un espacio de  enseñanza seguro, amable y respetuoso. Siendo fundamental que la actividad esté dirigida por profesores o técnicos, formados en instituciones reconocidas.

Somos un colectivo formado por más de 150 profesionales de la Educación física, Técnicos de Natación y Actividades acuáticas, y Guardavidas uruguayos. Basamos estos consejos en 3 pilares: respeto, seguridad y bienestar.

1. Bienestar del bebe/ niño y su familia: Las clases con bebés, niños y niñas pequeños deben presentar un ambiente rico en oportunidades, con seguridad y alegría, donde se potencie su desarrollo. Las experiencias negativas atentan contra el bienestar físico, psicológico y cognitivo, afectando el vínculo positivo con el agua.
2. Escucha activa: El llanto, la angustia, la tensión corporal y la resistencia física son signos de que la actividad no resulta placentera. La presencia de tos y vómitos son síntomas de ahogamiento. Las experiencias negativas reducen los aprendizajes y pueden generar traumas aún en la edad adulta.
3. No forzar: Las familias y los docentes deben permitir al alumno descubrir, aprender y desarrollarse a su propio ritmo. La propuesta debe ser extremadamente cuidadosa y respetuosa, evitando forzar la realización de habilidades. Más aún cuando el bebé o niño no tiene la posibilidad de decidir o de expresar su voluntad.
4. Cuidados: Es importante que la mamá y/o el papá u otros adultos referentes estén implicados en la actividad, para generar conductas seguras, conocer al bebé/niño en el agua, aprender cómo deben ser los cuidados y responder a la necesidad de afecto y contención del niño cuando lo necesita.
5. Supervisión: La supervisión y el acceso restringido al agua son capas de protección probadamente eficaces. Un bebe o niño pequeño podría ahogarse en pocos centímetros de agua, donde sus habilidades serán inútiles. Este aprendizaje para las familias debe estar presente en las clases.

La presencia activa de las familias es fundamental, brindando atención plena a los bebés, niñas y niños pequeños, para construir aprendizajes, prevención y seguridad acuática.