1. Embarazo y Puerperio 

Desde el equipo de profesionales de Pulso queremos ofrecer una mirada reflexiva en relación a la maternidad, la preparación para el embarazo y el puerperio teniendo en cuenta un abordaje integral.  

^{¿Cómo impacta emocionalmente el embarazo en la mujer y su entorno?} 

Transitar cambios emocionales y estrés en el embarazo es esperable. Se pueden presentar oscilaciones en el humor y en el estado de ánimo, siendo frecuente pasar de la alegría al llanto, así como también manifestarse una mayor irritabilidad, hipersensibilidad e inseguridad.   

^{¿Cómo podemos contribuir desde lo emocional durante el embarazo?} 

• Alentar a poder compartir las vivencias con otras madres y referentes emocionales  
• Tener un acercamiento a los cambios fisiológicos y emocionales que sucederán, anticipándose a las etapas que irán transcurriendo.  
• Generar el espacio para que todas las dudas, confusiones y temores puedan encontrar su comprensión, entendiendo que las mismas son esperables a la realidad de otras familias.   
• Promover hábitos y entornos saludables que propicien un adecuado desarrollo tanto para el bebé como para la madre, como por ejemplo una alimentación saludable o un ambiente libre de sustancias nocivas.  

• Habilitar la expresión de las emociones que surgen en este proceso sin juzgar o invalidar las mismas, generando un ámbito emocional de afecto y apoyo.  
• Es importante que la madre y su entorno se familiaricen con los servicios que su prestador le brinde respecto a cómo prepararse para el nacimiento, por ejemplo, plan de parto, parto humanizado, entre otras opciones.  

_{Acerca del puerperio} 

El puerperio es el período que sucede después del parto. En el mismo, el cuerpo sufre cambios físicos y funcionales progresivos los cuales son necesarios para restituir aquellos que sucedieron durante la gestación. Ocurre una adaptación recíproca entre el recién nacido y la mamá. Si bien esta etapa está comúnmente asociada a momentos gratificantes y placenteros, es también un período en la cual muchas mujeres y familias pueden llegar a sentirse vulnerables y angustiados, por lo que resulta fundamental habilitar y acompañar. La exigencia inagotable de un recién nacido, vivencia de una situación física nueva y desconcertante, dolores a nivel físico, pueden afectar el estado anímico. 

^{Algunos cambios emocionales en el posparto} 

Los cambios emocionales que se producen en el posparto suelen ser transitorios, pero afectan a numerosas mujeres en las primeras semanas después del parto.  

Suele ser un tema “tabú” porque se supone que la maternidad debe transitarse como una etapa plena, aspecto que se ha ido desmitificando a lo largo de los años. Ocurre que más de la mitad de las mujeres en etapa de puerperio transitan por síntomas depresivos los cuales forman parte de una depresión puerperal normal.  

Al llegar a casa luego del nacimiento del bebé, pueden sentirse bastante agobiados. Son momentos en los que deben centrarse en las necesidades del bebé que acaba de nacer, y cuando tengan tiempo libre, descansar lo más posible.  

Herramientas que pueden contribuir con el proceso de la familia: 

• Es fundamental respetar el proceso que transita la familia y los deseos de la misma, evitando presionar acerca de las visitas, los tiempos, el contacto físico con el bebé y el espacio del binomio mamá- bebé.  
•  Es importante observar y escuchar generando un clima de confianza y de privacidad que transmita comprensión y apoyo. 
• _{Evitar juicios de valor y entender que cada vivencia y experiencia es única de cada persona y que todos lo transitamos de diferente forma.}  

• Resulta oportuno facilitar el descanso, que puedan alimentarse saludablemente, dormir, bañarse, caminar, necesidades básicas que les permitan sentirse bien.   
• Generar espacios para el autocuidado, resulta fundamental para poder estar disponibles a las demandas del bebé.  Recibir el apoyo del entorno más cercano como de los profesionales de la salud.   
• Formar parte de algún grupo, pedir ayuda a familiares y amigos.  

Como etapa importante de la vida humana, el tránsito hacia la maternidad y paternidad implica un antes y un después en la vida de las personas y las familias. Recordemos que además de los períodos de ajuste y adaptación, se acompañan de momentos gratificantes que ayudan a vivir ese desafío como mayor plenitud.  Siempre es importante reconocer los tiempos en que puede ser necesario mayor ayuda o colaboración externa y animarse a solicitarlo es un paso a dar en estas etapas.  

Lic. Ps. Camila Freire

Lic. Ps. Verónica Varela

Lic. Ps. Verónica García 

Lic. Ps. Fiorella Torres